Son las dieciséis Carmelitas Descalzas del monasterio de la Encarnación de Compiègne (Francia). Tan pronto como la Revolución Francesa degeneró en terror, se ofrecieron a Dios como víctimas de expiación para implorar la paz para la Iglesia y su país.
Detenidas y encadenadas el 24 de junio de 1794, tuvieron la fuerza de comunicar también a los demás su alegría y su fe. Condenadas a muerte por su fidelidad a la Iglesia y a la vida consagrada y por su devoción a los Sagrados Corazones de Jesús y de María, fueron guillotinadas en París el 17 de julio de 1794, mientras cantaban himnos y después de haber renovado sus votos en manos de la priora, Teresa de San Agustín.
El decreto sobre el martirio fue promulgado el 24 de junio de 1905. La ceremonia de beatificación se llevó a cabo el 27 de mayo de 1906.
La celebrazione delle SS. Teresa di S. Agostino e compagne, vergini e martiri di Compiègne viene elevata al grado di Memoria obbligatoria.”

